Siempre he conocido el potencial de Ornellaia".

Tras anunciar recientemente su jubilación, el Director General saliente de Ornellaia, Giovanni Geddes, habla con db sobre cómo ha evolucionado el productor supertoscano a lo largo de sus 24 años de mandato y por qué el cambio climático es la amenaza más grave para el futuro del buen vino italiano.

Geddes anunció su retirada el mes pasado en Venecia, en la 15ª edición de Ornellaia Vendemmia d'Artista, declarando que dejaría el cargo a finales de año. Su sustituto aún no ha sido anunciado.

Se incorporó al gigante vinícola toscano Frescobaldi en 1996, tras haber trabajado en Rémy Martin y Antinori. En 2005 dirigió la adquisición por Frescobaldi de Tenuta Dell'Ornellaia a Constellation Brands, tras convertirse en Consejero Delegado de Ornellaia en 1999.

Geddes explica qué le atrajo de Bolgheri: "Siempre he conocido el potencial de Ornellaia y la singularidad de su terruño. Sólo faltaba encajar las piezas en una visión a largo plazo para hacerlo realidad".

Durante su casi cuarto de siglo al timón, Geddes ha supervisado importantes avances.

"Ha cambiado bastante, empezando por el hecho de que hemos decidido separar Masseto de Ornellaia para dar a ambos vinos finos la oportunidad de seguir su propio camino", explicó. "Era un reto que requería tiempo. En 2009, Masseto se convirtió en el primer vino italiano en debutar en La Place de Bordeaux (con la añada 2006), Ornellaia le siguió no mucho después."

"Por otro lado, Ornellaia continuó su ascensión como gran vino del mundo distribuyéndose hoy en 95 mercados. Hemos creado el proyecto benéfico de Ornellaia Vendemmia d'Artista que, desde 2009, apoya el mundo de las artes y lo más importante, el acceso al arte. En concreto, desde 2019 hemos decidido apoyar el desarrollo del programa Mind's Eye de la Fundación Guggenheim, que permite el acceso al arte a personas con baja visión e invidentes. Ornellaia es uno de los cinco socios globales del Guggenheim".

"Entre otras cosas, nació Ornellaia Bianco, un vino blanco que desde su añada de debut, 2013, se ha situado en la cúspide de la vinificación de la finca con el mismo estatus de liderazgo que el tinto insignia" db asistió a una cata vertical de Ornellaia Bianco en Londres el año pasado.

Un cambio importante para el productor supertoscano este año ha sido la marcha del director de la finca, Axel Heinz, que se ha unido a Château Lascombes en Margaux.

"Habrá una reorganización de las funciones dentro de la empresa, lo cual es normal, porque siempre tenemos que readaptarnos para seguir siendo líderes en nuestro sector", explicó Geddes. "Ornellaia tendrá un director de producción y un enólogo que completarán el equipo técnico de Ornellaia. Lo que no cambiará es el estilo de nuestros vinos, que reflejará el terruño que tenemos aquí. Tenemos el estilo de Ornellaia y el estilo de Masseto y todas las personas de nuestro equipo tienen esto en mente."

Marco Balsimelli, hasta ahora enólogo asesor de Eric Boissenot, ha sido nombrado nuevo director de producción de Ornellaia y Masseto.

A la pregunta de qué le ha llevado a tomar ahora la decisión de jubilarse, Geddes respondió: "He dedicado toda mi vida a trabajar. A mi edad, creo que es hora de bajar el ritmo y dedicarme a otras actividades que me llenen la vida."

"Desde mi punto de vista, los vinos finos italianos seguirán creciendo, ya que hoy todos los mercados reconocen su calidad excepcional y su identidad única. Basta con leer sobre el rendimiento de los vinos finos. Los vinos italianos están siempre entre los tres más buscados".

"Sin embargo", advirtió Geddes, "el aspecto medioambiental sigue siendo un reto con las consecuencias del cambio climático. Todos los productores deben informarse y tomar medidas contra este problema".

La añada 2023 ha estado marcada por las condiciones meteorológicas extremas en toda Italia, desde Piamonte hasta Sicilia, y en Toscana ha habido problemas similares para las vides, según Geddes: "Aquí en Bolgheri, las temperaturas extremas o peligros como el granizo o las heladas siguen siendo relativos".

Sin embargo, Geddes cree que Ornellaia está preparada para afrontar estos retos climáticos.

"Sin embargo, trabajamos con un enfoque preventivo con la tecnología que se utiliza principalmente para generar mapas precisos de los viñedos que nos ayuden a comprender mejor las variaciones de los crecimientos de las vides y la maduración dentro de la misma parcela. Utilizamos varias herramientas, como mapas de vigor mediante imágenes infrarrojas, mapas de resistividad, varias medidas de estrés hídrico, etc.", explica. "Por lo demás, intentamos reaccionar ante el calor y la sequía mediante prácticas de viticultura 'con los pies en la tierra', como cubiertas verdes acolchadas entre las hileras, copas más bajas y poco deshojado en la zona del fruto".

db anal izó recientemente la viabilidad a largo plazo de la viticultura italiana en su conjunto debido a la creciente extremidad del clima del país.