Las ventas de vino en EE.UU. siguen bajando

El informe anual del Silicon Valley Bank sobre el sector vitivinícola revela un "crecimiento del valor cercano al 0%" y advierte de que las "ventas flash" y los "mayores descuentos" serán cada vez más habituales en Estados Unidos.

Se prevé que las ventas de vino estadounidense continúen su lento descenso durante 2024, aunque se espera que las visitas a las salas de degustación y las ventas DTC aumenten ligeramente durante el año, al igual que las ventas de vino premium, según el 23º informe anual del sector vitivinícola del Silicon Valley Bank publicado el jueves 18 de enero.

Las estimaciones preliminares para el cierre de 2023 muestran un descenso de las ventas de vino en volumen de entre el 2% y el 4%, y se espera que las cifras finales de ventas en valor para el año pasado "ronden cerca del 0% de crecimiento", según el informe, aunque añade: "Las ventas totales de vino premium en valor mejorarán en 2024."

Una economía estadounidense que siga gozando de buena salud es clave para estas predicciones, según el autor del informe, Robb McMillan, vicepresidente ejecutivo y fundador de SVB Wine, quien pronostica que "es improbable que la economía entre en recesión en 2024".

McMillan, tanto en el informe como en un seminario web celebrado el jueves y seguido por miembros del sector vitivinícola internacional, expresó su mayor preocupación por los elevados inventarios mayoristas estadounidenses.

"Los mayoristas están llenos hasta los topes", afirma, lo que les hace ser "más exigentes" con lo que compran a los productores de vino. Los mayoristas "tienen más miedo a quedarse con existencias que tengan que descontar", dice McMillan, que a la inflación y "los costes de mantener existencias".

Según el informe, aunque los inventarios habían descendido ligeramente desde los máximos de mayo de 2023, se mantenían en 1,61 veces las ventas a finales de año.

"La relación ideal entre inventario y ventas a través de todos los canales de venta debería ser de 1,0 x en un escenario de crecimiento de volumen plano", afirma el informe, "pero aún más baja en el actual entorno de crecimiento negativo que habitamos hoy."

Sobreproducción

Otro motivo de preocupación citado en el informe es el continuo exceso de producción en dos de los tres principales estados vinícolas -California y Washington-, a pesar de que las ventas llevan tres años descendiendo.

La producción de Oregón se consideró "equilibrada con la demanda".

Se prevé que este continuo exceso de oferta perjudique especialmente a los grandes productores de gran volumen. "¿Cuándo veremos una corrección del mercado de la uva y el vino a granel en las uvas destinadas a vinos de menor precio?", se pregunta el informe, para responder a continuación: "Es probable que ocurra en 2024".

Por el momento se considera que los precios flexibles tienen "cierta resistencia", especialmente en los vinos de gama alta, pero el informe advierte de que es probable que en un futuro próximo se produzcan "ventas flash y mayores descuentos".

En su introducción, McMillan menciona una posible solución al continuo descenso de las ventas: más cooperación en el sector y menos luchas intestinas por la cuota de un mercado en declive.

"La mayoría de la gente cree que Darwin dijo que la evolución y la selección natural eran procesos influidos por la supervivencia del más fuerte", escribe. "Eso no es cierto. Darwin dijo que las especies que sobreviven a la presión externa son 'las más adaptables al cambio'. Eso es una pista de lo que tenemos que hacer".

El informe del SVB combina estudios propios y de terceros para analizar los resultados del sector vitivinícola del año anterior y hacer una serie de predicciones para el año siguiente. También ofrece información sobre varios segmentos del negocio, en particular sobre el rendimiento de las salas de degustación y la venta directa al público.

Un estudio publicado por SVB el año pasado destacaba que los precios de Napa se habían disparado hasta una media de 108 dólares por botella y que las bodegas estadounidenses se habían vuelto "excesivamente dependientes" de las salas de degustación. En consecuencia, según el informe, los productores de vino deberían abrir una segunda sala de deg ustación en una zona satélite alejada de su bodega para capitalizar las ventas de las salas de degustación.