La industria escocesa presenta un importante marco de gestión del agua

Una gran noticia para la sostenibilidad del whisky escocés es el marco establecido por la Scotch Whisky Association para reducir el consumo de agua en la producción de esta bebida espirituosa.

Dado que sólo se necesitan tres ingredientes para elaborar whisky escocés, y el agua es uno de ellos, la conservación del H2O es primordial para la supervivencia futura de la industria del whisky, por no hablar del planeta.

La Scotch Whisky Association (SWA) anunció ayer que ha publicado un Marco de Gestión del Agua, que ofrece a la industria orientaciones basadas en la investigación sobre cómo mejorar la eficiencia hídrica y reducir la cantidad de agua utilizada en todo el proceso de producción del whisky escocés.

El consumo de agua de las destilerías varía mucho en función de su capacidad y ubicación, pero en 2021 la SWA fijó un objetivo de 12,5 a 25 l/lpa (cantidad de agua utilizada por litro de alcohol producido) que los productores debían alcanzar para 2025, dependiendo del tamaño y la producción de la destilería.

Yendo un paso más allá, el nuevo Marco de Gestión del Agua se centra en tres áreas clave para dar a los miembros de SWA una dirección clara sobre cómo mejorar su eficiencia hídrica. Estas áreas son: Uso responsable; Compromiso y colaboración; y Promoción.

El marco fomenta la colaboración del sector para preservar este recurso vital.

Datos anteriores analizados por la SWA mostraron que la eficiencia hídrica ha mejorado un 22% desde 2012. La SWA seguirá recopilando datos para supervisar los avances y fijar objetivos que lleven al sector Scitch "más allá del cumplimiento" en materia de agua.

"El impacto de la crisis climática ya se está dejando sentir en la cadena de suministro de agua de Escocia y, aunque las destilerías lo gestionan bien, somos conscientes de que tenemos el deber de garantizar que nuestro uso del agua sea lo más eficiente y responsable posible", declaró Ruth Piggin, directora de sostenibilidad industrial de la SWA.

"Nos comprometemos a colaborar estrechamente con las partes interesadas, incluida la Agencia Escocesa de Protección del Medio Ambiente (SEPA), los organismos gubernamentales y otras partes relevantes, para seguir mejorando la administración del agua por parte del sector".

Nathan Critchlow-Watton, responsable de agua y planificación de la SEPA, añadió: "Puede que Escocia sea famosa por su lluvia, pero, como ya hemos visto este año, puede ser extremadamente vulnerable a periodos de tiempo prolongado y seco, y con el cambio climático se espera que sean más frecuentes en los próximos años. Las empresas que prosperen ante este reto serán las que reconozcan el vínculo entre prosperidad medioambiental y económica".

"Trabajarán con la SEPA y otros agentes de su sector para aumentar su capacidad de recuperación, reducir el consumo de agua y disponer de un plan bien establecido para cuando haya escasez de agua. Estas medidas reducirán la necesidad de que la SEPA imponga restricciones a su actividad.

"Es tranquilizador ver que la industria del whisky es proactiva, se toma en serio su responsabilidad de ayudar a proteger el medio acuático de Escocia y contribuye a su sostenibilidad a largo plazo para todos los que dependen de él."