¿Son los códigos QR digitales la solución a los sistemas de devolución de depósitos?

Los principales minoristas, como Co-op y Ocado, están probando códigos de barras digitales en los productos antes de la introducción de los sistemas de devolución de depósitos (DRS) en todo el Reino Unido, pero, como db descubre, su aplicación puede llegar demasiado tarde para los despliegues DRS.

Ocado inició su asociación con la empresa de software Polytag, responsable del desarrollo de la tecnología de códigos QR, a finales del año pasado, y Co-op hará lo propio en abril de 2023.

the drinks business ha hablado esta mañana con Alice Rackley, Directora General de Polytag, sobre las asociaciones y sobre si la tecnología podría utilizarse para agilizar la implantación del DRS, que ha causado gran preocupación tanto entre los minoristas como entre los productores de alcohol.

El plan de devolución de Escocia se ha retrasado hasta 2024 debido a la fuerte oposición del comercio. Sin embargo, incluso con el período de preparación ampliado, los minoristas escoceses han amenazado con poner fin a las ventas en línea ante un plan "inviable".

Ocado y Co-op se han asociado con Polytag para probar el sistema digital en plásticos, utilizando los códigos QR y una aplicación disponible para que la gente se la descargue y les ofrezca recompensas por depositar correctamente los plásticos en sus contenedores de reciclaje.

Las asociaciones aún no han abordado directamente la inminente implantación del DRS, pero Rackley cree que es el siguiente paso.

"Nuestra tecnología ha sido desarrollada para permitir a las marcas prepararse para los sistemas de devolución de depósitos digitales, y Ocado está absolutamente involucrado con nosotros por las razones del sistema de devolución de depósitos digitales", dijo a db esta mañana. "No quieren ser un punto de recogida. No quieren que sus conductores, que están en la puerta de casa entregando los productos, tengan que llevarse el plástico vacío, y con la normativa actual eso sería un requisito, así que esa es una de las razones clave por las que han empezado a trabajar con Polytag".

Los códigos QR digitales pueden introducirse fácilmente en los envases de vidrio mediante etiquetas de papel adhesivas, explicó Rackley, pero la empresa aún no tiene "ninguna marca interesada en hacerlo".

Y los productos enlatados representan un reto diferente. Según Rackley: "La única nuez que no hemos conseguido descifrar son las latas, y eso se debe sencillamente a que la industria conservera se resiste a dejar que se hagan pruebas. No es que no pueda hacerse. Es sólo que no hemos conseguido encontrar un socio para probarlo".

Polytag se reunió en enero de este año con Circularity Scotland, el administrador del plan DRS del país, para debatir el potencial del uso de la tecnología para su aplicación, reveló Rackley.

"Les explicamos nuestra solución y organizamos con ellos un taller de cuatro horas", explica Rackley. "Nos sorprendió gratamente que nos invitaran a un taller y se mostraron muy abiertos a nuestra tecnología".

Sin embargo, no se han hecho planes concretos antes del despliegue.

"La tecnología digital tendrá un papel en el futuro, pero no sé con qué rapidez, ni ellos lo saben", afirma.

Rackley criticó algunas partes de los próximos planes que podrían ejercer presiones económicas indebidas sobre los ayuntamientos. "Las máquinas expendedoras inversas suponen una destrucción encubierta de los ingresos de los ayuntamientos, y no hay mucha gente que hable de ello", declaró a db. "Es otra razón muy importante por la que se debería considerar seriamente la digitalización, ya que permitirá a los ayuntamientos mantener la custodia de ese material de alto valor en la acera".

El uso de la tecnología digital también facilitaría el sistema, algo que Rackley compara con "el uso de cajeros automáticos frente a la banca móvil".

Dijo: "Definitivamente creemos que una solución híbrida debería ser una consideración. Todo el trabajo y las asociaciones que estamos llevando a cabo nos acercan a una situación en la que lo digital puede formar parte de un sistema de devolución de depósitos de éxito."

Escocia tiene previsto implantar su sistema en marzo de 2024, pero aún no cuenta con un sistema digital, por lo que está por ver si la tecnología podrá aplicarse a tiempo.