¿Qué pasa con el whisky y los relojes?

La última tendencia en bebidas de lujo es maridar tu bebida con un reloj de edición limitada, descubre db. 

¿Cómo sabe que es la hora del whisky? Porque su lujosa botella de Bourbon viene acompañada de un reloj hecho a mano que le permite saber exactamente cuándo es el momento de sentarse con un vaso de algo con hielo.

La destilería Few Spirits de Chicago se ha asociado con otra empresa de Chicago -los relojeros Oak & Oscar- para crear un reloj de edición limitada que incorpora trozos de barrica de una producción de Bourbon extremadamente reducida.

Mientras que por delante el elegante reloj es igual que el reloj "Olmsted" de estilo clásico de Oak & Oscar, al darle la vuelta encontrará una moneda de madera integrada en el fondo del reloj. El disco de madera procede de una barrica seleccionada por la destilería para un lanzamiento de Bourbon Bottled in Bond de un solo barril, lo que significa que los aficionados al whisky pueden llevar un trozo de historia en su muñeca.

Como broche final, quien compre uno de estos relojes recibirá también una botella de Bourbon procedente de ese mismo barril.

Sólo se han fabricado 50 relojes, cada uno de los cuales tiene un precio de 1.850 dólares.

Las marcas de bebidas parecen alinearse cada vez más con el mundo de los relojes de lujo.

A principios de esta semana, db informó de que Château Latour, bodega bordelesa de primer crecimiento, se ha asociado con el relojero más antiguo de Suiza para crear un reloj muy exclusivo.

¿El verdadero argumento de venta? Se han utilizado guijarros del viñedo de Latour para crear la esfera del reloj, lo que permite al usuario acceder al terruño de la bodega las 24 horas del día.

Según el relojero suizo Girard-Perregaux, cada esfera del reloj tardó 30 horas en completarse, y los artesanos rebajaron cuidadosamente las piedras de viñedo hasta una astilla de 0,45 mm antes de montarlas sobre una base de latón.

El reloj Latour no está al alcance de cualquier consumidor de bolsillos holgados. En su lugar, se ofrecerá a los invitados privados del château de la orilla izquierda, así como a los visitantes de la villa de Girard-Perregaux en las montañas del Jura.

El reloj no tiene precio, pero sólo se han fabricado 18 unidades.

Los fabricantes de bebidas pueden estar buscando formas de atraer a una generación más joven de consumidores inspirados por la experiencia. Según Anna Kim, directora global de marca de la marca familiar de coñac Camus, los jóvenes consumidores adinerados buscan productos que les ayuden a disfrutar de una experiencia.

"Los consumidores, cada vez más exigentes, buscan productos que comuniquen con autenticidad su historia, haciendo hincapié en el terruño y el patrimonio", explica Kim a la revista drinks business en un artículo sobre si la Generación Z puede rescatar la categoría del coñac.