Un magnate chino será juzgado por la compra de Burdeos

El empresario Qu Naijie está acusado de malversar 32 millones de euros (28 millones de libras) de subvenciones estatales chinas concedidas para invertir en tecnología digital para comprar en su lugar 25 castillos de Burdeos.

Qu será juzgado en París en febrero por presunta malversación del dinero concedido por el Estado chino a su grupo Haichang. Se afirma que en lugar de invertir el dinero en tecnología digital, que era para lo que se le había concedido, optó por invertirlo en viñedos de Burdeos.

Su asimilación a la región se vio favorecida cuando fue invitado a unirse a la hermandad vinícola bordelesa La Commanderie du Bontemps. También fue miembro de la CCI (Cámara de Comercio e Industria), e incluso organizó un festival del vino en su ciudad natal, Dailan, en la provincia china de Liaoning, según informa Sud Ouest.

La mayoría de los castillos fueron adquiridos por Qu durante una oleada de compras entre 2010 y 2013. Se calcula que el valor total de las 25 propiedades, situadas en su mayoría en Libournais (la orilla derecha), ronda los 60 millones de euros (52 millones de libras).

Además de los fondos estatales que supuestamente malversó, Qu está acusado de utilizar facturas falsas de venta de viñedos para obtener un préstamo adicional de 30 millones de euros (26 millones de libras) de la filial luxemburguesa del Banco Industrial y Comercial de China, según informó el The Times. Al parecer, ese préstamo ya ha sido devuelto.

Los fiscales afirman que se utilizó una red de empresas extraterritoriales para encubrir las transacciones.

No es la primera vez que las actividades bordelesas de Qu llaman la atención de las autoridades. En 2018, los investigadores franceses de fraudes confiscaron 10 de sus fincas por las presuntas irregularidades financieras que rodearon su compra.

En 2014, el Grupo Haichang, que también ha invertido en propiedades, transporte marítimo y parques temáticos marinos, fue acusado por la Oficina Nacional de Auditoría de China de malversar fondos públicos, en el marco de la campaña anticorrupción del presidente chino Xi Jinping.

Qu, de 63 años, niega cualquier delito. La empresa de contabilidad Exco Ecaf está acusada como cómplice.