Los adultos mayores beben más en EE.UU., según un estudio

La tendencia de los jóvenes a beber menos que hace 20 años está bien documentada, pero ¿están compensando las generaciones mayores?

Los porcentajes de jóvenes de 18 a 34 años que declaran no haber bebido nunca, haber bebido en la última semana o haber bebido a veces más de lo debido son más bajos que hace 20 años, según un estudio de la empresa de análisis estadounidense Gallup.

Sin embargo, el consumo de alcohol en los tres indicadores ha aumentado entre los estadounidenses de más edad, mientras que se ha mantenido bastante estable entre los adultos de mediana edad.

Los resultados se basaron en un análisis de las tendencias de Gallup sobre los autoinformes de los estadounidenses acerca de sus hábitos de consumo de alcohol. Para permitir un análisis fiable de las tendencias por edades, los datos se revisan en tres periodos de tres años: 2001-2003, 2011-2013 y 2021-2023.

Entre los adultos menores de 35 años, el 62% declara beber alcohol, frente al 72% de hace dos décadas.

El consumo de alcohol ha aumentado entre los adultos mayores de 55 años, del 49% al 59% en el mismo periodo de 20 años.

Puede que los hábitos de consumo de alcohol entre los adultos más jóvenes sigan una tendencia a la baja, mientras que lo contrario puede decirse de los mayores, pero esto ha dado lugar a una división más equilibrada entre los dos grupos de edad. Según la investigación, sigue habiendo más bebedores menores de 35 años (62%) que mayores de 55 (59%).

Mientras que estos grupos de ambos extremos del espectro de edad registran ahora tasas de consumo similares, los de la franja intermedia, de 35 a 54 años, mantienen una tasa de consumo más elevada, del 69%, a la par con las lecturas anteriores del 67% para este grupo de edad.

La misma tendencia se observa entre los que se consideran bebedores habituales. Los adultos más jóvenes que beben son menos propensos que en el pasado a decir que tomaron una bebida alcohólica en los últimos siete días, pasando del 67% al 61% en las últimas dos décadas. Los adultos mayores, de 55 años o más, han hecho lo contrario, pasando del 63% al 69%.

Entre todos los estadounidenses (tanto bebedores como no bebedores), menos de cuatro de cada 10 adultos jóvenes (38%) parecen ser ahora bebedores habituales, al mismo nivel que los adultos de más edad (40%), siendo los adultos de mediana edad (48%) los más propensos.