Todos los medallistas de nuestro Global Chenin Blanc Masters

En nuestro concurso inaugural Global Chenin Blanc Masters, Patricia Stefanowicz MW descubre que, desde Sudáfrica hasta Canadá, los productores de vino elaborado con esta uva blanca están creando gotas de gran calidad.

La Chenin Blanc no es necesariamente la primera variedad de uva que viene a la mente, o a los labios, de los amantes del vino. Sin embargo, quizá habría que reconsiderar esta uva poco reconocida, como indica el impresionante número de vinos galardonados con medallas Master, Oro y Plata en nuestro concurso inaugural Global Chenin Blanc Masters. Este concurso de Maestros ha sido uno de los más destacados de nuestro año de evaluación, y ha despertado entusiasmo en todos los precios y estilos.

La Chenin, como Plant d'Anjou, se documentó por primera vez en el Valle del Loira francés en 1496 como variedad de uva blanca de Anjou, plantada por Thomas Bohier en los alrededores de Chenonceau, por lo que es casi seguro que es mucho más antigua. Su nombre procede probablemente del monasterio de Montchenin, desde donde se propagó y plantó por toda Touraine, para luego ser transportada de vuelta a Anjou. La primera mención escrita de la uva como Chenin aparece en 1534 en el primer libro de Gargantúa del poeta medieval de Touraine François Rabelais.

El Valle del Loira, concretamente Anjou-Touraine, es la tierra natal de la Chenin Blanc. Aquí se produce una amplia gama de estilos, desde Crémant de Loire, Saumur espumoso y Vouvray espumoso, hasta los vinos más espectaculares de Chenin, los vinos dulces de Vouvray, Montlouis, Bonnezeaux y Quarts de Chaume, de vendimia tardía e influenciados por Botrytis. En ellos, los altos niveles de azúcar se equilibran con una acidez abrasadora que permite que los vinos evolucionen y se conserven durante décadas. Entre estos extremos se encuentran los vinos secos, semisecos y semidulces de Anjou, Saumur y Vouvray. Los mejores ejemplos muestran deliciosos sabores a miel, lana mojada y manzanas, con un fondo mineral calcáreo.

Los ejemplares secos (o casi secos) están a veces influenciados por el roble y las lías, que añaden capas adicionales y refinamiento a esta variedad de uva de notable textura. Se cultiva un poco de Chenin Blanc en el oeste de Languedoc, alrededor de Limoux, y más al suroeste de Francia, donde a menudo se mezcla con Mauzac Blanc y Chardonnay. En el Chenin Blanc Masters 2023, los vinos franceses de Chenin Blanc que juzgamos eran muy buenos, y validan las cualidades que reconocen los amantes del vino. Los Chenin Blanc franceses tienen una capacidad extraordinaria para ofrecer una gran calidad con sabor, textura y relación calidad-precio.

Espumoso 100% Chenin Blanc

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También hubo algunos vinos magníficos de procedencias inesperadas. Big Head Winery, de Niagara-on-the-Lake, en el este de Canadá, produce vinos concentrados y elegantes, a los que un poco de Botrytis añade complejidad. Son la señal de la capacidad de una nueva región para producir vinos Chenin serios, al igual que sus vecinos del norte del estado de Nueva York. El Chenin Blanc cultivado en Okanagan, al oeste de Canadá, también parece tener éxito. También había un par de vinos interesantes de Maharastra (India) y uno o dos de Mendoza (Argentina), así como de California.

Un vino impresionante, aunque caro, procede de una zona poco conocida para la Chenin. Oliver Zeter, un producernégociant de la región alemana de Pfalz, elabora un vino serio que gustó tanto a los jueces que le otorgaron el Master Award.

El jurado coincidió unánimemente en que la Chenin es una uva injustamente olvidada. Con equilibrio, textura, acidez vigorizante y, a menudo, una madera hábilmente tratada, estos vinos son el complemento perfecto para la comida, ya se trate de un pastel de pescado cotidiano o de alta cocina. Los vinos Chenin Blanc son memorables y representan una gran relación calidad-precio.

100% Chenin Blanc

Mezcla espumosa

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Sobre el concurso

Con jueces de gran calidad y un proceso de muestreo único, el Global Chenin Blanc Masters brinda a sus vinos la oportunidad de convertirse en estrellas. El concurso de 2023 se juzgó el 8 de agosto en el Novotel London Bridge y contó con jueces experimentados. Los mejores vinos fueron premiados con medallas de Oro, Plata o Bronce según su resultado, y aquellas expresiones que destacaron por ser sobresalientes recibieron el espaldarazo definitivo: el título de Chenin Blanc Master. En este informe sólo figuran los ganadores de las medallas. Si desea más información, visite el sitio web de Global Masters o, para participar en futuros concursos, que le darán la oportunidad de aparecer en Internet y en la prensa, llame al teléfono +44 (0) 20 7803 2420 o envíe un correo electrónico a Sophie Raichura a: sophie@thedrinksbusiness.com

El Chenin Blanc del valle del Loira, apreciado en los Países Bajos como su vino casi local, se llevó a Sudáfrica. Los esquejes llegaron con los holandeses en el siglo XVII, cuando el Cabo estaba bajo la dirección del gobernador Jan van Riebeeck. La Chenin se plantó inmediatamente en la región y se convirtió en la variedad de uva blanca dominante, donde parece producir la Chenin de mayor calidad incluso hoy en día.

A pesar de la crisis provocada por la pandemia del virus Covid-19 y los numerosos cierres provocados por la pandemia, la Chenin Blanc sudafricana sigue prosperando. Aunque a veces se la trata como una variedad de trabajo, los vinos de Chenin Blanc que evaluamos se comportaron como pura sangre.

Uno de los grandes aspectos de Sudáfrica es la alta calidad de los estilos con y sin barrica. Los jueces encontraron una buena relación calidad-precio por debajo de 15 libras y experimentaron vinos sublimes en los niveles de precio de 15 a 20 libras, de 20 a 30 libras y de 30 libras en adelante.

Los vinos fermentados en barrica parecen conseguir el equilibrio a la perfección, con suaves notas de avellana y pan tostado que acentúan los agradables sabores a crema pastelera y limón. Los mejores ejemplos parecen mostrar una madurez extra, con maracuyá, guayaba y piña que brillan a través de una acidez incisiva. No cabe duda de que el "Old Vine Project" sudafricano contribuye a la alta calidad de esta variedad. Las cepas viejas de Chenin, a menudo plantadas en vaso, pueden certificarse si tienen más de 35 años, y casi todos los productores cuentan con ellas para elaborar vinos de gran calidad. El resultado es la pureza de la fruta unida a una fabulosa textura y capas de sabor. Vinos increíblemente fiables con un interés añadido, son el sueño de cualquier consumidor. Quizá merezca la pena destacar un vino especial, M'hudi, de la primera explotación vinícola de propiedad negra del Cabo, que obtuvo un Master Award por su Chenin Blanc absolutamente delicioso y "boutique".