Olvida todo lo que sabes sobre el maridaje con Rioja....

En un imaginativo maridaje con vinos de Rioja, el sumiller Gonzalo Rodríguez Díaz explica a db por qué hay muchas más combinaciones apetitosas para las gotas de esta región que las carnes rojas.

"Cuando se trata de la selección de Rioja en las cartas de vinos londinenses, suele haber uno o tres estilos clásicos, los sospechosos habituales", explica a db Gonzalo Rodríguez Díaz, sumiller del restaurante La Dame de Pic, con dos estrellas Michelin, en Tower Hill. "Pero en Rioja hay mucho por descubrir y la gente está empezando a darse cuenta".

El objetivo de su clase magistral de maridaje, parte de la Residencia Rioja celebrada en The Ned el miércoles 21 de junio, era poner de relieve la inmensa diversidad de la aclamada región española y animar a los aficionados al vino a alejarse de sus gustos más conservadores.

"Quiero romper percepciones", dijo. "A la gente le gusta meter las cosas en cajas y tenemos que deshacernos de las etiquetas que ponemos a las cosas".

De hecho, uno de los mensajes clave de la Residencia Rioja fue que Rioja no es un estilo de vino, sino un lugar, con tantas idiosincrasias y estilos como su ubicación.

La clase magistral de Rodríguez Díaz puso en tela de juicio algunas suposiciones tradicionales, como que sólo los vinos tintos atrevidos de la región necesitan decantación. Para demostrarlo, sirvió una Garnacha Blanca "extremadamente potente" (Basilio Izquierdo Blanco 2014) elaborada al estilo bordelés, que requiere entre dos y tres horas de aireación antes de ser consumida.

Del mismo modo, desmiente la anticuada idea de que los rosados riojanos son baratos y alegres, descorchando un rosado 100% Tempranillo Gran Reserva producido por Bodega Akutain en Rioja Alta, que se vende a 85 libras la botella. "Me encanta tomarlo con berenjenas asadas, con la piel ligeramente quemada, y quizá con un poco de caviar", dice Rodríguez Díaz.

Probamos un vino de naranja Maturana Blanca de la añada 2019, que pasó 100 días en sus pieles antes de envejecer en ánforas. Calificando a Maturana Blanca de "uva incomprendida", el sumiller aplaude la capacidad de la variedad para elaborar vinos con tensión y textura gracias a su alta acidez y, dice Rodríguez-Díaz, bien podría "merecer un lugar en un restaurante de alta cocina."

El vino (La Pequeñita Maturana Blanca de Alonso & Pedrajo) explota con notas tropicales de mango y maracuyá, y marida de maravilla con un ceviche de dorada, marinado en mango, guindilla y leche de tigre.

Según Rodríguez-Díaz, el vino funcionaría igual de bien con "anguila o trucha, ambas muy comunes en la región de Villalba de Rioja, y que formaban parte importante de la dieta de la gente de allí".

Rodríguez Díaz sigue desafiando el statu quo y subraya que se pueden encontrar vinos increíbles en añadas que han sido muy criticadas.

"La añada 2017 en Rioja tiene muy mala reputación, pero he encontrado vinos increíbles de ese año", dijo, instando a la gente a no descartar los vinos basándose únicamente en el año en que fueron elaborados.

Destaca Bodegas Moraza Garnacha 2017, un vino biodinámico de San Vicente extraordinariamente fresco, envejecido íntegramente en depósitos de hormigón, cuyas uvas se recogieron "tres semanas antes que todos los demás". El vino es complejo y elegante, sin que su graduación alcohólica del 13% pese en el paladar.

Rodríguez Díaz señala que los vinos de la misma añada también pueden tener un sabor drásticamente diferente debido a que algunos productores embotellan enseguida mientras que otros lo hacen bajo demanda, lo que significa que algunos de los vinos "ven mucha más madera que otros".

"Cada vez más en Rioja vemos vinos que no te dejan exhausto", dijo. "Vinos en los que puedes disfrutar de una segunda botella y de una conversación con amigos".

Por último, Rodríguez Díaz instó a consumidores y profesionales del vino a "no pensar tanto en zonas o pueblos de Rioja a la hora de elegir un vino. En su lugar, piensen en los productores, en su filosofía y en lo que intentan hacer; en el estilo y la personalidad que hay detrás de los vinos", ya que no hay dos bodegas iguales, aunque estén situadas una al lado de la otra.