Château Cantemerle: "El 2023 es un buen indicio de hacia dónde va la finca

Château Cantemerle se asocia desde hace tiempo con vinos bordeleses a buen precio, pero su nueva directora general, Laure Canu, quiere que la finca sea conocida por su calidad, más que por sus precios, y una nueva e importante inversión en calidad será clave para ello. Arabella Mileham se reunió con ella para saber más.

After joining Château Cantemerle from five years as deputy general manager of Château Angélus in 2021, it is perhaps no surprise that Laure Canu, who trained as a lawyer in Paris before completing a Master’s degree specialising in Wine and Spirits Management, brings some ideas to shake things up at the fifth-growth château in Haut Medoc. One of the oldest properties in Bordeaux, it can date its history back to the 12th century.

El año pasado, Colin Hay's hizo una brillante crítica del chateau por la añada 2022, prometiendo que era el comienzo de lo que estaba por venir. Y Canu está claramente de acuerdo. La añada 2022 supuso un paso adelante en términos de calidad, con una cosecha excepcional, y afirma que la 2023 probablemente mostrará la dirección a seguir por la propiedad.

"Estamos muy orgullosos de la calidad del 2023; no es un gran paso entre el 2022, que fue tan excepcional, pero el 2023 se parece más a lo que queremos producir. Es un buen indicio de hacia dónde va la finca".

Her stated aim – to make Cantemerle’s reputation less about the good value of the wines, and more about its undoubted quality – is something that she admits might take “a very long time”. However, as well as her own extensive travel, Canu has recently hired sales director, Pierre-Alexandre Gazaille to boost the team’s ability to develop their markets and talk to clients both in Europe and across the world. The US, for example is a key target market where it currently does less than 10% in the US, “but for such an important market, I think we could do better,” Canu notes. “We have to be careful to have more balance in distribution.”

"Cantemerle tiene algo amistoso: te dan una cálida bienvenida porque conocen la marca y puedes abrir una botella y bebértela, es accesible, puedes abrirla joven o guardarla durante años", explica. "Sin embargo, es muy importante que se den cuenta de la calidad de los vinos, el terruño y el trabajo que conllevan, para que no piensen sólo en el precio", añade.

Además, el equipo tiene "una gran colaboración con los negociants". "Tenemos la suerte de contar con un negociant dispuesto a ayudarnos en este proyecto, que cree en el vino y en nosotros", afirma. "Es importante hablar de la calidad antes que del precio".

Canu’s plans are taking tangible form in the “massive investment” and renovation project undertaken by Cantemarle’s owner, French insurance group SMABTP group, who bought the chateau from the Dubos family in 1981. This two-year project will see the restoration of the 18^th century chateau and orangery, to provide better accommodation for visitors and guests, as well as a big tasting room and boutique. Being able to welcome people to the renovated domain with its new tasting rooms will help underline this, she notes.

Sin embargo, la mayor oportunidad para reforzar la calidad del vino vendrá de la mano de la nueva sala de barricas, que triplicará el número de barricas de todos los tamaños e introducirá un sistema de alimentación por gravedad, con bodega de barricas subterránea.

Esta nueva inversión en el castillo y en las instalaciones de vinificación se suma a la realizada anteriormente por SMABTP en los viñedos, que fueron replantados, remodelados y ampliados en los años ochenta y noventa.

"Sólo había 20 ha de viñas, por lo que los viñedos estaban en muy mal estado", explica Laure Canu. Como resultado, se replantaron los viñedos y se "reequilibraron" en cuanto a variedades, reduciendo el merlot y el cabernet franc en favor del cabernet sauvignon.

"Cuando compraron Château Cantemerle, había un 36% de cabernet sauvignon, hoy es un 67%, así que ha sido un cambio enorme".

"Invirtieron mucho en el viñedo hace cuarenta años, y ahora tenemos un viñedo que está en plena forma, con cepas muy sanas, pero era frustrante tener la instalación técnica de los años 90, con grandes cubas, ya que no podíamos trabajar con precisión".

El primer objetivo de la renovación era la nueva sala de cubas técnicas, que se espera que esté lista en el verano de 2025. Esta nueva sala contará con 120 nuevas cubas, el triple que la antigua, de tamaños comprendidos entre 35 y 170 hL.

"Esta gama más amplia nos permitirá trabajar con mayor precisión utilizando la alimentación por gravedad desde la vendimia hasta la crianza, ya que dispondremos de una bodega de barricas subterránea", explica.

La diferencia será enorme, explica Canu. "Es un enorme paso adelante en la calidad de los vinos. Château Cantemerle siempre ha sido muy consistente -las añadas clásicas como la '17 o la '13 siempre fueron muy buenas debido al terruño- y mantendremos el estilo, la elegancia característica de Cantemerle y la frescura del vino, pero intentaremos añadir algo de carne y complejidad, el paladar medio será más preciso, así como la calidad de los taninos."

También permitirá al equipo mejorar su conocimiento de las vides y las parcelas, añadió, y por tanto podrá ser más selectivo con las mejores partes del viñedo. "Ya que no se conocía la calidad intraparcelaria, cada parte del viñedo, y eso será mucho mayor de lo que es hoy".

Aunque la bodega no estará terminada hasta 2025, el equipo ya ha empezado a realizar esos cambios en una bodega provisional, una zona con temperatura controlada que antes se utilizaba como almacén. También se han utilizado ya algunas de las nuevas cubas de acero inoxidable, en sustitución de algunas de las antiguas barricas de madera; en el futuro sólo utilizarán acero inoxidable, añade Canu.

"Empezamos el trabajo de mejora de la calidad de los vinos el año pasado. Tenemos mucha más selección: antes producíamos el 70% del grand vin y el 30% de segunda etiqueta, pero a partir de 2022 decidimos producir sólo el 60% del grand vin, para poder concentrarnos en el corazón del viñedo y en las cepas más viejas, sobre todo de cabernet sauvignon".

Esta selección fue muy eficaz, señala, y la calidad del 2022 destacó tanto que el equipo decidió tener "al menos" un 70% de cabernet sauvignon en la mezcla final de cada año para tener la firma del cabernet sauvignon y "el terruño de grava" (antes era un poco más ad hoc, dependiendo de la añada, explica).

El equipo también ha moderado la crianza en roble, utilizando cada vez menos roble nuevo "para centrarse en el terruño", explica Canu. "El periodo de crianza es corto, de 12 meses, y solía ser de un 40% de roble nuevo. En 2022 y 2023 fue sólo del 35%, pero estamos experimentando y probando actualmente diferentes porcentajes."