Temperaturas récord del aire en la superficie de los viñedos en 2024

Una oscilación austral de El Niño tiene un 90% de posibilidades de establecer temperaturas medias récord del aire en la superficie en todo el mundo, provocando incendios forestales, ciclones y olas de calor en muchas regiones vitivinícolas este verano.

Un nuevo estudio realizado por investigadores chinos revela que una desviación del fenómeno meteorológico El Niño traerá un calor excepcional a muchas partes del mundo este verano.

Conocida como la "oscilación del sur", se cree que esta transgresión de El Niño ocurre cada pocos años en el Pacífico Sur y, según el estudio reciente, publicado en la revista Scientific Reports, tiene efectos de gran alcance en el resto del mundo.

Se declara un fenómeno de El Niño cuando las temperaturas del mar en el Pacífico oriental tropical se elevan a 0,5 °C por encima de la media a largo plazo.

Dirigido por la doctora Congwen Zhu, de la Academia China de Ciencias Meteorológicas, el estudio analizó los patrones de El Niño entre 1951 y 2023. A partir de los resultados, los investigadores pudieron predecir que bajo un El Niño "moderado" este año, es probable que la Bahía de Bengala y Filipinas experimenten temperaturas medias récord en la superficie.

Sin embargo, si en 2024 se produce un "fuerte" fenómeno de El Niño, también se prevé que los mares del Caribe y China Meridional, así como algunas zonas del Amazonas y Alaska, se enfrenten a sus temperaturas más altas desde que comenzaron los registros.

Como ha informado db , China ya es más susceptible a experimentar olas de calor extremas que Europa y Estados Unidos.

Según un estudio de la organización World Weather Attribution (WWA), ahora se pueden esperar olas de calor severas "aproximadamente una vez cada 15 años en América del Norte, una vez cada 10 años en el sur de Europa y una vez cada cinco años en China".

La oscilación austral de El Niño de este año puede interrumpir este patrón.

En el escenario «moderado», es probable que la temperatura media mundial del aire en la superficie suba entre 1,03 °C y 1,10 °C por encima de la temperatura media tomada entre 1951 y 1980. En el caso de un El Niño "fuerte", se espera que la temperatura media mundial aumente entre 1,06 °C y 1,20 °C este año.

Estas altas temperaturas superficiales aumentan significativamente la probabilidad de eventos climáticos como incendios forestales, ciclones tropicales y olas de calor en las zonas costeras debido al aumento de la temperatura del agua.

¿Qué significa esto para los viticultores?

Según la publicación Proceedings of the National Academy of Sciences, las temperaturas constantemente más altas amenazan actualmente hasta el 85% de las áreas vitivinícolas del mundo, con uvas quemadas por el sol y la sequía que afectan las cosechas.

Regiones como España, que luchó contra temperaturas abrasadoras el año pasado, ya han sido llevadas al límite en términos de manejo del calor extremo. En septiembre de 2023, el ministro de Medio Ambiente de España anunció que el gobierno estaba invirtiendo 12.000 millones de euros para hacer frente a la devastadora sequía, que destruyó cultivos en 3,5 millones de hectáreas de tierra.

Los viticultores italianos se enfrentaron a condiciones similares el año pasado, con temperaturas que alcanzaron los 48 °C en Sicilia el pasado mes de julio.

"El cambio climático es rápido, desafortunadamente mucho más rápido que las tradiciones agrícolas de muchas áreas de producción", dijo a db Ivan Cappello, consultor de vinificación de Uva Sapiens, que trabaja con varias fincas en toda Italia.

Los meteorólogos de la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA, por sus siglas en inglés) han advertido que el impacto económico del clima extremo experimentado solo durante 2023 podría costar a la economía mundial 3 billones de dólares en los próximos cinco años.