Trump insta a los bebedores de cerveza de EE.UU. a volver a Bud Light

El expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha pedido a sus seguidores que le den al propietario de Bud Light, AB InBev, "una segunda oportunidad" a medida que los resultados continúan cayendo.

Mientras los Kansas City Chiefs vencían dramáticamente a los San Francisco 49ers en el Superbowl el fin de semana pasado, AB InBev, uno de los mayores patrocinadores del juego, se vio envuelto en una pelea de fútbol político gracias al expresidente Donald Trump.

AB InBev ha invertido mucho en la reconstrucción de su marca de cerveza Bud Light, sobre todo a través de la costosa publicidad de la Superbowl, tras el furor generado por el influencer transgénero Dylan Mulvaney promocionando Bud Light con una lata personalizada el pasado mes de abril.

La asociación provocó una reacción violenta entre los conservadores estadounidenses y las ventas de Bud Light se desplomaron un 30% en los meses siguientes. A pesar de los indicios de una recuperación parcial, los resultados de la marca de cerveza siguen afectados. Las cifras de Nielsen para enero de 2024 las muestran languideciendo un 29,5% por debajo del nivel alcanzado en el mismo mes del año pasado.

La caída también significó que, por primera vez en dos décadas, Bud Light fue desbancada como la cerveza más vendida de Estados Unidos por Modelo Especial de Constellation Brands.

La semana pasada, Trump respaldó públicamente a AB InBev e instó a los bebedores a volver a cambiar su apoyo a la marca.

En las redes sociales calificó la vinculación con Mulvaney como "un error de proporciones épicas", pero insistió en que "Anheuser-Busch no es una empresa woke".

Pasando por alto el hecho de que AB InBev es formalmente una empresa belga, publicó: "¿Anheuser-Busch es una gran marca estadounidense que tal vez merezca una segunda oportunidad? ¿Qué te parece? ¡Quizás, en cambio, deberíamos perseguir a esas compañías que buscan DESTRUIR ESTADOS UNIDOS!"

Trump continuó diciendo que estaba "construyendo una lista" de empresas alternativas "woke" que, según él, estaban trabajando para "destruir a Estados Unidos", y amenazó con publicarla "para que el mundo la vea".

No es del todo imparcial

Los rivales demócratas se apresuraron a señalar que el expresidente, que se postula para un segundo mandato como candidato republicano en las elecciones de este año, puede no ser del todo imparcial en lo que respecta a AB InBev.

En el pasado, dijeron, Trump había respaldado al grupo cervecero más grande del mundo diciendo: "Anheuser-Busch gasta 700 millones de dólares al año con nuestros GRANDES agricultores, emplea a 65 mil estadounidenses, de los cuales 1.500 son veteranos, y es socio corporativo fundador de Folds of Honor, que ofrece becas para familias de hombres y mujeres caídos en servicio".

No solo eso, los demócratas señalaron que Trump tiene previsto asistir a un evento de recaudación de fondos el próximo mes organizado por el cabildero republicano Jeff Miller, cuya empresa supuestamente recibió 260.000 dólares de AB InBev el año pasado.

Además, los registros indican que el propio Trump tiene una participación personal en AB InBev por valor de 5 millones de dólares, por lo que, según sus críticos, no le disgustará que las acciones de la cervecera se hayan disparado tras su pronunciamiento.

Ahora se sitúan sólo ligeramente por debajo del máximo de 12 meses de 67,09 dólares por acción alcanzado antes de la asociación con Malvaney.