La industria rechaza el concepto de cerveza en polvo

La industria cervecera bávara ha respondido al desarrollo de la primera cerveza en polvo del mundo, que se está creando en Klosterbrauerei Neuzelle, con sede en Alemania Oriental.

La revolucionaria cerveza, desarrollada por Stefan Fritsche en su fábrica, se elabora con sólo dos ingredientes: polvo y agua, y se pretende que siga pareciendo y sabiendo a cerveza.

A pesar del avance del producto, Benedikt Meier, miembro de la Asociación de Cervecerías Privadas de Baviera, declaró a la AFP que, aunque la cerveza en polvo es una "bonita innovación", es importante recordar que "el disfrute de la cerveza tiene que ver sobre todo con la convivencia", y señaló que es una bebida que "se disfruta en los pubs, en tu local, en una fiesta o entre amigos y personas afines".

Esto significa que "una cerveza en polvo cuyo uso se centra en la preparación en casa no es una alternativa seria para este grupo objetivo".

Meier continuó explicando que el invento no puede considerarse una amenaza para los cerveceros, porque "no pondrá en peligro, ni siquiera desafiará, a nuestras cervecerías tradicionales".

Fritsche, sin embargo, está decidido a que su concepto de cerveza en polvo triunfe y añade: "Queremos emprender un nuevo camino, por así decirlo... hacer una cerveza en polvo de verdad, normal y de buen sabor".

Fritsche explicó que "el principal mercado objetivo serán los países africanos y asiáticos, ya que un polvo es mucho más fácil y barato de transportar a largas distancias que las botellas de cerveza" y admitió que "sabemos que los bebedores de pilsner y los entusiastas de la cerveza artesana, especialmente en Alemania, se mostrarán inicialmente escépticos ante nuestro producto".

La cerveza en polvo, que Fritische ha desarrollado en laboratorios europeos durante los dos últimos años, hace que su exportación sea un 90% más barata que la de la cerveza tradicional.