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Jeremy Clarkson producirá cerveza baja en alcohol

Jeremy Clarkson, personaje televisivo y propietario de una granja, ha registrado su propia marca de cerveza con bajo contenido alcohólico en su granja Diddly Squat. 

Crédito: Instagram/ @jeremyclarkson1

La marca, apodada Diddly Fresh, sigue a la creación de su marca de cerveza Hawkstone, que ha aparecido en su programa de Amazon Prime y ha estado disponible en su tienda de la granja y en la hostelería.

Su Hawkstone Lager original, que incluía ingredientes de su granja, se elaboró con la ayuda de Cotswold Brew Co. La cerveza debe su nombre a una piedra neolítica situada cerca de su granja en Gloucestershire.

Según el Daily Mirror, ahora ha presentado una solicitud a la Oficina de Propiedad Intelectual del Reino Unido que abarca la cerveza y el vino con y sin poco alcohol.

Se trata de la primera incursión de Clarkson en el mundo de las bebidas bajas en alcohol tras la polémica suscitada en diciembre del año pasado, cuando Clarkson vio cómo le prohibían la cerveza en un pub tras sus comentarios sobre Megan Markle en The Sun.

El comentario, que Clarkson dijo que era una referencia a una escena de Juego de Tronos, fue ampliamente condenado y ha provocado una serie de artículos que sugieren que debería ser despedido por ITV y Amazon. También batió el récord de quejas sobre un artículo ante la Organización Independiente de Normas de Prensa (IPSO), recibiendo más de 20.800 hasta el 20 de diciembre.

Clarkson ya ha hablado en otras ocasiones de los problemas de la industria cervecera y del coste de los ingredientes. La antigua estrella de Top Gear se escandalizó por la fuerte rebaja que los intermediarios aplicaban a la cebada cultivada en su casa entre el momento en que salía de su granja y llegaba a manos de los cerveceros.

El presentador reconvertido en agricultor se sorprendió al descubrir la fuerte subida de precios entre las 205 libras por tonelada que le pagaron originalmente por la cebada de primera calidad que cultivaba en sus tierras y las 580 libras por tonelada que costaba cuando llegó a manos de los cerveceros.

Clarkson, que tuvo que hacer frente a numerosos obstáculos para cultivar su propia cebada debido al frío y a un "suelo desesperante", quiere asegurarse de que los agricultores reciban el valor íntegro de sus productos y está estudiando la forma de eliminar los precios inflados por los intermediarios.

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