¿Tendrá pronto el alcohol etiquetas de advertencia sobre el cáncer como los cigarrillos?

El futuro del etiquetado del alcohol vuelve a debatirse en las esferas gubernamentales debido a que las organizaciones sanitarias de Australia piden una reforma.

Según informaciones aparecidas en la prensa nacional, las botellas de cerveza y vino podrían llevar pronto etiquetas de advertencia sanitaria, similares a las de los envases de cigarrillos.

Los debates, que se iniciaron debido a que el gobierno australiano está buscando fórmulas para concienciar sobre los riesgos para la salud vinculados al consumo de alcohol, al tiempo que los organismos sanitarios presionan para que se añadan etiquetas de advertencia a los envases de las bebidas, están a punto de concluir.

De llevarse a cabo, la medida obligaría a las empresas de bebidas alcohólicas a incluir en las botellas y latas etiquetas de advertencia sobre el riesgo de cáncer, cardiopatías, hepatopatías y otros problemas de salud derivados del consumo de alcohol.

Las organizaciones que impulsan el cambio son la Asociación Médica Australiana, el Real Colegio Australiano de Médicos Generales y la Fundación para la Investigación y Educación sobre el Alcohol (FARE).

En declaraciones a Nine Newspapersel ministro adjunto de Sanidad y Asistencia a la Tercera Edad, Ged Kearney, ha revelado que se está estudiando la idea y ha explicado: "El gobierno australiano reconoce la importancia del etiquetado para concienciar a los consumidores y tratar de prevenir los daños relacionados con el alcohol".

El profesor residente de la AMA Steve Robson se hizo eco de que la incorporación de etiquetas sería beneficiosa para informar a la gente sobre los daños del alcohol y añadió: "La AMA lleva muchos años pidiendo que los productos alcohólicos tengan etiquetas sencillas y claramente visibles en la parte frontal del envase que adviertan a los consumidores de los riesgos para la salud de un consumo excesivo. Las etiquetas de advertencia sobre los efectos del alcohol pueden ayudar a los consumidores a elegir mejor, mejorando su salud y reduciendo las presiones sobre el sector sanitario directamente relacionadas con el consumo excesivo de alcohol."

La presidenta del RACGP, la Dra. Nicole Higgins, insistió también en la necesidad de contar con "mejor información y apoyo" sobre los riesgos del alcohol, ya que contribuye a una "pesada carga de morbilidad en Australia".

A pesar del empuje del lobby sanitario, un portavoz de Alcohol Beverages Australia se mostró contrario a la idea de la etiqueta de advertencia y señaló que "los datos sanitarios son complejos y no pueden reducirse a una etiqueta".

Última primavera, el negocio de las bebidas informó de un nuevo estudio que parecía apoyar la reducción de la "aceptabilidad social" del consumo de alcohol mediante la adición de advertencias sanitarias en las etiquetas. Sin embargo, el organismo regulador del sector se opuso y tachó el estudio de "desproporcionado".

Además, en febrero de 2022, db informó de que el Parlamento Europeo había votado si adoptaba las recomendaciones de un informe sobre el cáncer de pulmón en el que se planteaba incluir advertencias sanitarias obligatorias en el vino, entre otras medidas propuestas para las bebidas alcohólicas en Europa, lo que demuestra que el tema está lejos de ser ignorado.