Vignerons franceses destruyen vino español en protesta contra las importaciones baratas

Los viticultores franceses destrozaron cientos de cajas de cava y tiraron miles de galones de rosado español para protestar contra las importaciones baratas que afectan a las ventas nacionales de vino.

Los viticultores que protestaban en la ciudad fronteriza de Boulou interceptaron camiones que transportaban vino español a Francia, rompiendo 10.000 botellas de cava y derramando por la carretera un camión entero cargado de rosado importado a granel.

Unos 500 viticultores franceses participaron en la protesta, que tuvo lugar el jueves 19 de octubre.

Los viticultores franceses han vertido miles de litros de vino español en la carretera en señal de protesta.

Los viticultores franceses están descontentos con el apoyo del gobierno a las bebidas alcohólicas baratas procedentes del extranjero.

Ayer por la mañana, 300-400 viticultores de varias regiones del sur de Francia... pic.twitter.com/TT1m6x3s8I

- Slava (@Heroiam_Slava) 20 de octubre de 2023

Los bajos precios del vino extranjero han causado problemas a los viticultores locales, que luchan por vender sus propios productos y salen a la calle para manifestarse contra lo que consideran competencia desleal.

Frédéric Rouanet, presidente de la Asociación de Vignerons de Aude, que encabezó la protesta, advirtió a las autoridades francesas de la protesta el martes, mientras los viticultores se reunían en Ferrals-des-Corbières para debatir lo que describieron como la peor crisis vitivinícola de los últimos 20 años.

"Si queréis la paz, preparaos para la guerra", dijo durante la reunión.

"Que se sepa en París", continuó, "que la situación en el sur de Francia empeora cada día un poco más y que los trabajadores honrados hemos decidido rebelarnos".

"Que París sepa que el Gobierno tiene una gran responsabilidad en la caída del consumo de vino y que debe compensarnos como corresponde".

Los bodegueros franceses han protagonizado una protesta contra las importaciones baratas de #España tras interceptar dos camiones en el peaje de Le Boulou, cerca de la frontera hispano-francesa, y destrozar miles de litros de cargamentos de vino rompiendo botellas y vertiendo vino tinto en la carretera. pic.twitter.com/D3u3lbL5Nk

- (@NoiseAlerts) 19 de octubre de 2023

En una carta que se enviará a los comerciantes de vino franceses y a otros compradores, se pide "la paralización total de la compra de vino de otras regiones o del extranjero hasta que los vinos de nuestro departamento se vendan a un precio justo, es decir, los de 2020 teniendo en cuenta la inflación de los últimos años".

Rouanet ha instado al Gobierno francés a proporcionar un paquete de rescate financiero de 2 millones de euros para los cultivadores, empresas y cooperativas del Aude en dificultades.

El presidente de la Asociación de Vignerons de Aude ha calificado la protesta de "inicio de una guerra económica que vamos a librar", según el El Telégrafo.

"No se puede aceptar la situación tal como está", ha declarado Frédéric Rouanet, presidente del sindicato de viticultores de la región de Aude. "A partir de hoy, vamos a eliminar la posibilidad de que los compradores puedan conseguir vinos baratos de otros lugares... vamos a detener las importaciones españolas".

La acción ha recibido el apoyo de Alain Ginies, vicepresidente del consejo de Aude, a pesar de su ilegalidad. Dijo: "Siempre hemos estado cerca de nuestros viticultores, y lo seguimos estando hoy. Nuestros dos puntos fuertes económicos a nivel departamental son el turismo y la viticultura. "

El Gobierno español ha condenado estos actos de los viticultores franceses de destrucción de cargamentos de tomate, vino tranquilo y cava procedentes de España y destaca que este bloqueo amenaza la libre circulación de mercancías dentro de la Unión Europea.

La Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG) ha pedido sanciones "severas" contra el Gobierno francés y contra los agricultores que han atacado los camiones españoles.

Sin embargo, es poco probable que los sucesos de la semana pasada sean los últimos del conflicto, ya que Rouanet ha convocado otra protesta para el 25 de noviembre.