Las acciones japonesas alcanzan su nivel más alto desde 1990

Los estrategas afirman que "los inversores extranjeros han vuelto", ya que el índice de precios de Tokio alcanzó su punto más alto desde agosto de 1990.

Podrían ser buenas noticias para los fabricantes japoneses de whisky y sake, ya que el índice de precios de Tokio (Topix) subió más de un 6% esta semana (en lo que va de año) y sigue cotizando al alza, lo que refleja un mercado de inversión en línea con su apogeo de 1990.

Este índice de base amplia, compuesto por unos 2.000 integrantes, ha obtenido mejores resultados que sus homólogos regionales de Asia-Pacífico.

Frank Benzimra y Tsutomu Saito, estrategas de renta variable asiática de Societe Generale, declararon el martes 16 de mayo que "los inversores extranjeros han vuelto, lo que dice algo sobre la naturaleza de la recuperación del mercado de renta variable en Japón".

Los inversores extranjeros compraron acciones japonesas por un valor neto de 2,1 billones de yenes (15.400 millones de dólares) en abril de 2023, aunque el sector corporativo de Japón sigue siendo el mayor comprador neto de acciones japonesas, con un volumen de 1,1 billones de yenes en lo que va de año.

El Nikkei 225 también subió a su nivel más alto desde noviembre de 2021, ya que los inversores buscan una alternativa a China.

Los recientes viajes de Warren Buffet a Japón se han interpretado ampliamente como su respaldo al mercado nipón, mientras que el Financial Times informaba de que Japón ha salido de la recesión este mes.

En marzo, la empresa de bebidas reveló que Tokio se había convertido en el sexto mercado financiero mundial más importante, según la encuesta anual de The City of London Corporation, que analiza más de 95 parámetros diferentes, incluida la actividad de financiación verde en todas las clases de activos.

Parece que la suerte del país está cambiando después de que el gobernador del Banco de Japón, Haruhiko Kuroda, cambiara el rumbo de los mercados mundiales al liberar 3,4 billones de dólares de efectivo japonés en el mundo de la inversión en 2016.

Las medidas de Kuroda para suprimir el rendimiento de los bonos hace siete años dieron lugar a una montaña de inversiones en el extranjero por valor de más de dos tercios de la economía japonesa.